Hoy después de meses de inestabilidad no sé si estoy aún más perdida que al principio o si la vida de alguna forma me está empujando para que mejore. Me siento presionada y estafada, curiosamente siempre que escribo aquí me siento exactamente igual. Hoy siento que ya no soy capaz de superar lo que la vida me depara, una parte de mi tiene ganas de estancarse y no tener que volver a hacer nada nunca más sin embargo mi otro yo siempre me contradice y me obliga a no ser así, a no abandonarme a mi misma.
Pero me siento cansada, estoy absorta en mis pensamiento y pocos de ellos me hacen sentir bien. No sé si estoy intentando huir de mi alrededor como si de una carrera con el destino se tratase o si la vida que vivía se está desplomando en pedazos como si fuese el atrezo de un teatro. Tengo ganas de huir y empezar de cero, ver que quiere el mundo para mi y por otro lado estoy muerta de miedo, tengo miedo a que me vuelvan a romper el corazón, de volver a caer en los brazos de alguien que sólo me miente por que sé que sabe que soy lo suficientemente estúpida como para volver a dejarme llevar por otro Don Juan sin sentimientos. Por desgracia a pesar de todo el dolor que siento también anhelo esa sensación de que haya alguien a mi lado.
Ahora me siento desnuda ante todas las personas que están en mi vida, se me ha caído la coraza y no tengo más ganas de luchar por lo bonito que se supone que trae la vida. En lo que llevo de verano me he dado cuenta de que este último año ha sido una completa mentira que he aceptado con mucho gusto. Hasta que las cosas ya no encajaban, necesitaba preguntar tantas cosas para saber que estaba pasando que no era capaz de preguntar ninguna y cuando lo hacia no recibía una respuesta clara, era como ver destellos de luz en pleno incendio, sólo te desorienta más de lo que ya estabas.
Hoy sé que no estoy sola pero sí, es una sensación extraña y contradictoria, hasta hace un par de meses tenía con quien compartir absolutamente todo y ahora siento que no tengo nada y algo en el fondo de mi me dice que esto no va a ser momentáneo, este sentimiento de frustración ha venido para quedarse y como ya hice en su momento debo abrazar de nuevo la soledad y esperar que el destino no quiera jugar más con mi corazón para encontrar de nuevo mi sitio, un lugar donde me vuelva sentir acogida o al menos la prioridad de alguien.
Igual es que soy una persona muy egocéntrica y desconfiada, me gusta sentirme atendida pero me cuesta mucho creer a alguien cuando me habla de amor, mi cerebro entra en corto circuito y automáticamente pienso que es una engaño y sólo soy capaz de divagar sobre lo bonito que sería que alguien me quisiese de verdad en su vida, sin miedo y sin vergüenza. A fin y al cabo lo único que busco es a una persona con la que no me sienta engañada, que un día me diga A y al día siguiente igual a no ser que me explique que ha cambiado, necesito a alguien que no tengo miedo a romperme el corazón diciéndome la verdad y no se atreva a romperme el corazón diciéndome mentiras.
A pesar de todo muero de ganas de volver a caer en los brazos de un Don Juan perdidamente enamorada y quizá ese sea mi mayor fallo. Al principio pensaba que todos queríamos enamorarnos y cada vez pienso que menos gente quiere caer en la locura del amor. Igual estoy tan triste por que pienso que las personas que me rodean se toman el amor como algo rápido, ligero y sencillo, desde luego el amor no debe ser un tortura pero tampoco es un paseo. Después de tantos años intentando encontrar el adecuado me he dado cuenta de que pocos o ninguno son capaces de dar la cara, yo aún no he encontrado a esa persona que me quiera en su vida y que se capaz de dar la cara por mi y ante mi, pero tengo la tonta esperanza de que algún día en algún sitio de este pequeño planeta encontraré a alguien tan emocionado como yo por hacer las mismas cosas que yo y que igual quiere compartir su vida conmigo, pero nunca se sabe y el destino es caprichoso.